1878: en Miskolc (Hungría) sucede una inundación. El río Sajó sube un metro por minuto, impidiendo el escape de la mayor parte de la población. Mueren ahogadas unas 500 personas. Ya había habido varias inundaciones graves en 1691, 1788, 1813, 1845 y 1853, pero esta fue la peor.1
«En este día internacional, insto a todos los Estados Miembros a que ratifiquen la Convención o se adhieran a ella sin demora, y exhorto a los Estados partes en la Convención a que la apliquen. Es hora de poner punto final a todas las desapariciones forzadas.»
Mensaje del Secretario General de las Naciones Unidas, Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas 2015
La desaparición forzada se ha usado a menudo como estrategia para infundir el terror en los ciudadanos. La sensación de inseguridad que esa práctica genera no se limita a los parientes próximos del desaparecido, sino que afecta a su comunidad y al conjunto de la sociedad.
La desaparición forzada se ha convertido en un problema mundial que no afecta únicamente a una región concreta del mundo. Las desapariciones forzadas, que en su día fueron principalmente el producto de las dictaduras militares, pueden perpetrarse hoy día en situaciones complejas de conflicto interno, especialmente como método de represión política de los oponentes. Es motivo de especial preocupación:
el acoso de los defensores de los derechos humanos, los parientes de las víctimas, los testigos y los abogados que se ocupan de los casos de desaparición forzada;
el uso por los Estados de la lucha contra el terrorismo como excusa para el incumplimiento de sus obligaciones;
y la todavía generalizada impunidad por la práctica de la desaparición forzada.
Debe prestarse también especial atención a los grupos de personas especialmente vulnerables, como los niños y las personas con discapacidad.
El 21 de diciembre de 2010, la Asamblea General, en virtud de la resolución A/RES/65/209 , expresó su preocupación, en particular, por el aumento de las desapariciones forzadas o involuntarias en diversas regiones del mundo, como los arrestos, las detenciones y los secuestros cuando son parte de las desapariciones forzadas o equivalen a ellas, y por el creciente número de denuncias de actos de hostigamiento, maltrato e intimidación padecidos por testigos de desapariciones o familiares de personas que han desaparecido.
1878: en Miskolc (Hungría) sucede una inundación. El río Sajó sube un metro por minuto, impidiendo el escape de la mayor parte de la población. Mueren ahogadas unas 500 personas. Ya había habido varias inundaciones graves en 1691, 1788, 1813, 1845 y 1853, pero esta fue la peor.1
¿Dónde está tu hermano?”, la voz de su sangre grita hasta mí, dice Dios. Esta no es una pregunta dirigida a los demás, es una pregunta dirigida a mí, a ti, a cada uno de nosotros. Esos hermanos y hermanas nuestros trataban de salir de situaciones difíciles para encontrar un poco de serenidad y de paz; buscaban un lugar mejor para ellos y para sus familias, pero han encontrado la muerte. ¡Cuántas veces aquellos que buscan esto no encuentran comprensión, acogida, solidaridad! ¡Y sus voces suben hasta Dios!”
“¿Quién de nosotros ha llorado por este hecho y por hechos como éste?”. ¿Quién ha llorado por la muerte de estos hermanos y hermanas? ¿Quién ha llorado por estas personas que estaban en la barca? ¿Por las jóvenes mamás que llevaban a sus niños? ¿Por estos hombres que deseaban algo para sostener a sus propias familias? Somos una sociedad que ha olvidado la experiencia del llorar, del “padecer con”: ¡la globalización de la indiferencia nos ha quitado la capacidad de llorar!”
Papa Francisco
En recuerdo de todos aquellos que huyendo de la guerra, del hambre o de la miseria, han dejado su vida en el mar Mediterráneo o en cualquier otra etapa de su trayecto.
Jesús dijo "Ama a tu prójimo como a ti mismo". Y Santa Joaquina de Vedruna: "Quisiera abrazar las necesidades de todos los pueblos".
Como dentro de mi propia familia tengo personas que tuvieron que emigrar de España en busca de un futuro, siento en mis propias carnes esta triste situación a la que los países europeos no parecen o no quieren dar respuesta.
«En este Día Internacional, reitero mi llamamiento de larga data a todos los demás Estados para que firmen y ratifiquen el Tratado —especialmente a los ocho necesarios para que entre en vigor— como un paso decisivo en el camino hacia un mundo libre de armas nucleares.»
Mensaje del Secretario General, Ban Ki-moon, en el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares 2015
Desde que en 1945 se llevó a cabo el primer ensayo nuclear, se han realizado casi 2.000 pruebas de este tipo, sin prestar mucha atención a sus efectos devastadores sobre la vida humana. Menos aún se ha estudiado la precipitación radiactiva derivada de los ensayos atmosféricos.
Tanto la reflexión retrospectiva como la historia nos han mostrado los efectos trágicos y aterradores de los ensayos nucleares, especialmente cuando se producen fallos en las condiciones controladas y más aún teniendo en cuenta que las armas atómicas contemporáneas son cada vez más poderosas y destructivas.
Con el objetivo de captar la atención del mundo sobre la gravedad de este asunto y poner de relieve la necesidad de una acción unificada, el 2 de diciembre de 2009, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 29 de agosto Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, mediante la aprobación por unanimidad de la resolución 64/35 .
La resolución de la Asamblea General fue propuesta por la República de Kazajstán con el fin de conmemorar la clausura del polígono de ensayos nucleares de Semipalatinsk el 29 de agosto de 1991.
El Día tiene por objeto alentar a las Naciones Unidas, los Estados Miembros, las organizaciones intergubernamentales y no gubernamentales, las instituciones académicas, las redes de juventud y los medios de difusión social a que informen de la necesidad de prohibir los ensayos de armas nucleares, como un paso importante hacia el logro de un mundo más seguro, y a que eduquen y sensibilicen al público al respecto.
El año 2010 fue la primera conmemoración del Día Internacional contra los Ensayos Nucleares. Cada año, desde entonces, el Día se ha observado mediante la coordinación de diversas actividades en todo el mundo, tales como simposios, conferencias, exposiciones, concursos, publicaciones, enseñanza en instituciones académicas, programas de televisión y radiodifusión y otros medios. También se han celebrado diversoseventos en la Sede de las Naciones Unidas. Para la observación del Día en 2013 se proyectan actividades similares.
El Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, lo ha expresado con gran claridad: «Un mundo libre de armas nucleares sería un bien público global de mayor prioridad.» Al decir, en mayo de 2010, que la prohibición de los ensayos nucleares desempeñaba un «papel esencial», todos los Estados Partes en el Tratado sobre la no proliferación de las armas nucleares se comprometieron a trabajar para "lograr la paz y la seguridad en un mundo sin armas nucleares".
El Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, junto con otros eventos y actividades, ha propiciado un entorno global con perspectivas más optimistas respecto de un mundo libre de armas nucleares. Si bien ha habido señales visibles de progreso en varios frentes, los desafíos persisten.
Las Naciones Unidas anhelan que un día se eliminen todas las armas nucleares. Hasta entonces, es preciso observar el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares mientras nos esforzamos por promover la paz y la seguridad en todo el mundo.